- ¿Cómo sabías que amaba este lugar? -lo miré sorprendida.
- Es que, no lo sabía… solo que, quería enseñarte uno de mis escondites favoritos…
- ¿Escondites? Michael, es una playa… todo el mundo viene aquí.
- Te equivocas, esta es mi playa.
- ¿Tú playa? Ah, cierto… me olvidaba de que eras famoso.
Nos miramos y empezamos a reír. Courtney rompió con la quietud y empezó a correr.
- Mírala, es como un ave que la acaban de liberar. -me dijo con la expresión llena de ternura.
- Lo sé. No sabes cuánto me alegra verla así.
Me senté en la arena y él hizo lo mismo.
- ¿Tenías una prima aquí?, no lo sabía.
- Bueno, no te puedo mentir Mike… ella no es mi prima.
- ¿Qué?, ¿entonces?
Comencé a contarle la historia de Courtney, le conté cuando la conocí, le conté cuánto sufría en su casa, le conté que era la niña más tierna pero con una madurez única y por último le conté cuánto la había llegado a apreciar.
Michael me miró conmovido y apretándome la mano, me levantó de la arena para ponerme al frente de él.
- Eres de las personas que ya no hay y tuve la suerte de que fueras tú la que me entrevistara, te conocí y ya no quiero que te separes de mí. -tomándome de las dos manos- Campanita, gracias por ser parte de mi vida. Por favor, nunca me dejes y te prometo aquí ante la majestuosidad de las olas, ante el radiante Sol y ante Courtney, tu adorada niña… que jamás te dejaré indefensa, que jamás dejaré que alguien te haga daño, que siempre te sacaré una sonrisa cuando vea la tristeza golpear tu corazón.
- Michael… -susurré.
Tapó con su largo dedo mis labios y acto seguido, me abrazó con ternura. Pude sentir como el aroma de sus cabellos rizados me embriagaba todo el ser y el roce de su piel con la mía provocaba como pequeñas descargas eléctricas en todo mi cuerpo.
Me separé de él, pero no lo suficiente. Michael fijó al instante su mirada en mis labios para después fijar toda la intensidad de su mirada en mis ojos, yo no sabía que hacer, no podía huir… él me sujetaba fuerte de las manos.
De repente, Courtney gritó.
- ¡Courtney!
Rompí la magia entre Michael y yo para correr hacia ella.
- ¿Qué pasa niña?, ¿dónde estás?
- ¡Valeria, ven a ver esto!
Me dirigí hacia ella, que estaba a unos metros de nosotros sentada en la orilla del mar.
- ¿Qué te pasó? -pregunté angustiada.
- A mi nada Vale, pero tienes que ver esto…
- No vuelvas a asustarme así Court, pero dime… ¿qué es lo que te ha hecho gritar de ese modo?
- Mira…
Se levantó para señalarme una estrella de mar que había quedado varada en la orilla, era una hermosa estrella… nunca había visto una igual.
- Es hermosa, ¿verdad?
- Sí, es muy bonita.
Sentí a Michael atrás mío poniendo sus dos manos en mis hombros.
- ¿Pasó algo malo?
- No, Court encontró esta estrella de mar y como es tan hermosa, gritó de la emoción. -coloqué mi mano sobre la suya y lo miré.
- Déjenme verla.
- Aquí está, mira…
Le enseñó la dicha estrella y él, al igual que nosotras, se quedó maravillado ante la belleza de tal equinodermo. Misteriosamente, la estrella tenía forma de un medio corazón y el color rosado, era tan intenso casi llegando al color rojo.
- Courtney, pequeña… ¿te lo quieres llevar? -se acercó a ella.
- ¿De verdad puedo?
- No. -los interrumpí.- no te lo puedes llevar Court, la estrella pertenece aquí y sería egoísta de tu parte si te lo llevas. Ven linda, dejémosla libre.
Courtney me miró decepcionada y acto seguido, me obedeció. Michael me sonrió, pero veía algo raro en su mirada, como si ese día estaba dispuesto a hacer algo guardado desde hace tiempo.
Empezamos a caminar los tres juntos, casi sin decir nada. Por ratos, Michael me lanzaba miradas perforándome el ser, haciendo que me estremeciera de una manera vergonzosa. Al rato sentí molestias para caminar, los zapatos que llevaba no eran cómodos, así que opté por quitármelos y cargarlos en mis manos. Seguimos caminando hasta que Michael comenzó a correr tirando de mi brazo para que lo imitara, hice lo mismo con Courtney.
Empezamos a correr, a gritar, a reír, por ratos uno de nosotros terminaba en el piso por un mal paso, pero eso no impedía la inmensa felicidad que sentíamos cada uno.
Me sentía libre, con toda esa brisa golpeándome el rostro, el agradable olor a mar y los rayos del sol quemándome la piel blanca… era como un sueño hecho realidad.
Después de un rato, caí rendida a la arena y quedé con la vista al cielo. Al instante pude sentir la presencia de Michael a mi lado.
- ¿Cansada? -ofreciéndome la mano para levantarme.
- ¿Eh? No, no. Estoy bien. -sonreí y tomé su mano para después levantarme.
- Bueno, yo si estoy cansado… hace mucho tiempo que no corro y juego de esa manera.
- ¿No vienes seguido aquí? -curioseé.
- Sí, pero solo vengo… me siento a la orilla del mar y pienso. Muchas de mis canciones las escribí aquí, es un sitio excelente para hacerlo.
- Aunque nunca haya escrito canciones, supongo que sí… es un buen lugar.
Michael me dedicó una hermosa sonrisa y yo me ruboricé, se dio cuenta y soltó una pequeña carcajada.
- Suelo hacer que te ruborices con mucha frecuencia.
- No te creas… suelo ruborizarme muy seguido, además… el sol ha quemado mi rostro y por eso…
- Campanita… -me interrumpió- deja de poner excusas.
Me miró serio, para después pasar suavemente su pulgar por mi mentón. No hice más que sonreír en señal de afirmación.
- Esta bien, no volveré a ponerte más excusas… lo siento.
- Solo quiero que cuando me digas algo, seas lo más sincera posible… necesito mucho de eso.
Tomé su meñique para cruzarlo con el mío.
- Desde ahora te prometo, no decir más mentiras. Para, de cierta forma, agradecerte todo el cariño que me has brindado en tan poco tiempo.
Terminé de decir esto y Michael me miró con ternura, levantó un poco la comisura de sus labios.
- Bueno, creo que es hora de irnos. -levantándose.
Sorprendida por la forma en que Michael rompió la conversación, disimulé.
- Si, tienes razón… iré a buscar a Courtney. -me levanté.
- Te acompaño.
- Como quieras…
Empecé a caminar dejando atrás a Mike y sin saber el por qué, me enojé con él.
Encontré a Courtney sentada en la arena, con la mirada al cielo y las manos cruzadas.
- Court, tenemos que irnos…
- ¿Ah?, pero… ¿regresaremos?
- Pues…
- Sí -interfirió sorpresivamente Michael- cuando tu quieras regresamos pequeña.
- Gracias Michael.
Courtney se levantó y de un tiro se lanzó a los brazos de él, quedé sorprendida al ver la acción de Court y cuando ví los ojos de Michael, estaban llenos de amor y felicidad.
- ¡De nada!, de nada mi pequeña Courtney.
Estuvieron en esa posición un par de segundos y se separaron. Tomé de la mano a Court y con Michael a nuestro lado, nos fuimos de la playa.
Subimos al carro y nos ubicamos en la misma posición de cuando recién venimos, el tramo fue más tranquilo y callado.
Courtney cayó rendida de sueño, había corrido más de lo normal. Yo apoyé el codo a la ventana para después con mi mano tirar para atrás el cerquillo que cubría mi frente y quedar en esa posición.
Fijé mi mirada en el retrovisor del carro para que Michael pudiera corresponderme y una vez que lo hizo… desvié la mía en acto de molestia.
- ¿Te pasa algo?
- No, ¿por qué?
- Porque me estas lanzando miradas de enojo desde que dejamos la playa.
- No Michael, no es nada.
Frenó el carro en una luz roja.
- Prometiste que ibas a hablarme con total sinceridad. -alzando la voz.
- Michael, despertarás a Courtney…
- Valeria… -bajó la voz y me miró fijamente.
- Es que, ni yo sé por qué me siento enojada… quizás porque cuando te hice la promesa, no le tomaste interés alguno.
- ¿Cómo no le voy a tomar interés?, ¿acaso no escuchas lo que te digo?
Suspiré y al cambiar la luz roja por verde, Michael siguió manejando.
- Por eso te digo que no me hagas caso, suelo cambiar de humor así.
- ¿Segura?
- Sí Michael.
Pasaron varios minutos hasta que llegamos a la mansión, abrieron las puertas y una vez adentro Michael salió del coche para luego ayudarme a hacer lo mismo.
Cuando salí abrí la puerta del asiento donde se encontraba dormida Courtney, me agaché y empecé a despertarla.
- Court, ya llegamos… levántate linda. -no se levantaba.- Court, Court… tenemos que irnos ya, ¡COURTNEY!
Logré que se levante, pero aún estaba soñolienta, Michael y yo soltamos carcajadas.
- No se rían, de verdad estoy cansada.
- Entonces ya vámonos, Adela debe estar preocupada.
- Invita un día a Adela a venir, me gustaría verla de nuevo… es muy guapa. -sugirió Michael.
- Si, claro le consultaré. -sonreí- Vamos Court; adiós Mike… gracias por todo.
- Espera… -tomó de mi brazo he hizo que voltee hacia él- Court, pequeña… ve adelantándote, ¿si?
Courtney asistió y se fue caminando un poco más adelante.
- ¿Qué pasa Michael?
- Valeria, basta de todo esto ¿si?
- ¿A qué te refieres?
- Quiero ser honesto contigo, porque eso fue lo que nos prometimos hoy día. Siento que te estoy lastimando en algo que yo no me doy cuenta y…
- No Michael -lo interrumpí- no me estas lastimando en lo absoluto, en cambio, eres el ser que se ha portado de la forma más amable… contigo aprendí que no hace falta conocer años luz a alguien para llegar a quererla con intensidad. No sabes todo lo que tengo que agradecerte y si me estoy comportando como una niña el día de hoy… te pido disculpas, no mereces que te trate así.
- Bonita, quiero decirte una vez más… que tu no estas sola, me tienes a mi para cualquier problema que tengas, ¿si? -sujetando mi mentón- no te retengo más, Courtney espera y Adela también… hasta mañana.
- Adiós Mike.
Michael posó un delicado beso muy cerca de mis labios, acto que hizo que me sonrojara escandalosamente. Me alejé y alcancé a Courtney, tomamos un taxi y camino a casa pensé en Michael más de lo común.
Cada día que pasaba, sentía que Michael se volvía parte de mi mundo, de mi cosmos; sentía cada vez más un fuerte cariño hacia él llegando al extremo de estremecerme cada tiempo que pensaba en sus ojos, en su sonrisa, en su aroma, en sus labios, en sus perfectos y delicados rasgos, en todo lo que Michael hacía cuando yo estaba a su lado, en las miradas que me lanzaba y en las palabras que me dijo en la playa.
- Maldición… -susurré.
- ¿Pasa algo Vale?
- No, no pasa nada linda…
- Te pasa algo y aunque no me quieras contar yo sé cual es la causa de tu angustia.
- A ver, dime cual es señorita “sabelotodo”.
- Michael…
Me sorprendí… pero no dije nada, volteé la mirada hacia la ventana y al instante ya estábamos en la puerta del departamento.
Entramos y Adela nos esperaba con una inmensa sonrisa que se le fue al ver mi angustiada expresión.
- Parece que no les fue bien.
- Bueno a mi si me fue excelente, pero creo que Valeria no puede decir lo mismo. -dijo divertida.
- Si me fue bien Adela, solo que… no nada, olvídalo.
- No, ahora nos cuentas a mí y a Court lo que te pasa… mientras cenamos.
Nos sentamos a cenar, pero yo no tenía apetito. Adela empezó a cuestionarme y esta vez no escapé de ello.
- A ver, ¿qué pasa contigo Vale?
- No sé… me siento, rara. -llevando una mano a la cabeza.
- O quizás enamorada. -intervino Courtney al terminar de pasar un montón de comida.
- ¿Enamorada?, no hables esas cosas Court…
- Tal vez y tenga razón -respondió Adela- capas y te has enamorado de Michael. Era de imaginarse.
- ¡No, no era de imaginarse!, yo jamás quise eso y lo sabes muy bien Adela.
- ¿Osea que si lo estas? -me presionó Courtney.
Suspiré.
- Mira Valeria, no es tu culpa… no es un crimen querer a alguien, pero mírate, estas hecha un lío y no sé si podrás continuar con todo esto.
- ¿A qué te refieres? -me sobresalté.
- Me refiero a que no seguirás con la entrevista, esta vez lo haré yo y para evitarte el “sufrimiento” -haciendo las comillas con las manos- terminaré en menos de dos semanas. Eso quiere decir, que en menos de un mes estaremos de vuelta en Chicago.
Terminó de decir eso para después levantarse de la mesa y dejarme a mí sentada a punto del colapso.
O M G!! ¿Que quieres que te diga?, ME ENCANTA!, aay, que tierno es Michael. Se que trama algo, jaja, y Tatiana, se ha hecho una roca por todo lo que ha pasado, en cierto modo la entiendo, pero igual!, debería dejarse querer!! *w*
ResponderEliminarMe encantó el capítulo, espero conti pronto!!, te quierooo :)
Por cierto, leeré con mas detenimiento esta nove, comenzaré otra vez! ;D
olaaaaaa me encanta nina que eres genial, no dejas de impresionarme, Michael ya deberia de decirle lo que siente, y vale aunque se que su vida fue dificil no deberia er tan dura y estar con esas mermas (= lo digo con L.O.V.E. ok? te adoro chica vas de mejhor en mejor ya espero ansiosa el otro cap y adela que mala por cierto, courtney se parece mucho a mi tan nina y linda aaaa si que se parece a mi hahaha bueno besitos abrazos nos vemos nena
ResponderEliminarPAZ Y AMOR
BIE LIAO
T.T ahiii qe hermosa toda tu historiaa ...
ResponderEliminarme deja sin palabras, qe lindo es michael
hahah era de esperarse qe se enamorara
de ese hermoso ser ^^ ahiii
me comuebe mucho lo de court ...
ahi no todo de tu nove me encanta *.*
hahaha siguela pronto porfaa
me muero si ya no hace valeria la entrevista
eehh ya esta a un pasito del amor
ambos hahah ahi bno FELIZ AÑO
;D qe se mucho mejor qe el anterior sale .
qe estes bn chaoo :)
-.-
lo dig lo digo y lo repitoo
ResponderEliminarq inoportuna curtney
justo en ese montnoo y x una estrella estrellada ¬¬"!
jajaja io q vale la mato pero ia q jajjaa
continualaa prontoo ahijadaaa
nu sabs km espero el sgt cap!!...
PD si no subs cap pronto voy a tu ksa y t jalo d las patas!! XD..y creeme jajaj ia se dnd vives ¬¬ XD muahahahhaa (risa a lo thriller XD)
CHICAS! gracias por sus comentarios :) en serio me sacan una sonrisota!
ResponderEliminarY bueno.. disculpeeen! Valeria esta media bipolar u_u JAJAJA!
naah, sólo tengamosle paciencia :D
Un beso a cada una de ustedes si?
L.O.V.E